jueves, 25 de marzo de 2010

Nuestra vida en Wellington




Después de pasar dos semanas en el "departamento del curry" nos mudamos a una mini latinoamérica en pleno centro de Wellington. Lo llamo así porque es un departamento de dos pisos en donde vivimos cuatro argentinos y tres chilenos. No nos mudamos porque no hayamos estado cómodos, sino que algunas cuestiones del bolsillo nos hicieron decidir cambiar de lugar.
Les cuento de nuestro hogar dulce hogar: el depto queda en pleno centro (como si fuera el microcentro pero en Nueva Zelanda y con la tranquilidad de NZ). Hace un tiempo esto fue una oficina, asique en algunas partes la distribución es medio rara para ser una casa, pero le da un toque especial. Tenemos cuatro habitaciones, una cocina, un comedor amplios, y una muy buena terraza. Como es zona de oficinas no tenemos vecinos, asique de noche se puede hacer ruido sin problema que nadie se queja.
Antes de mudarnos compramos en una venta de garaje de todo un poco para poder tener una habitación con ciertas comodidades (o sea una cama y ropa de cama!). Acá todo el mundo se maneja con muebles de segunda mano. No es una deshonra comprar una cama usada o un sillón, hasta la gente con más entrada económica compra cosas así. Para que tengan una idea, en el Salvation Army se puede comprar un colchón por treinta dólares o menos. Hay ropa, sábanas y todo lo que se pueden imaginar! En nuestro caso tuvimos suerte de conocer una pareja que nos vendió sus cosas y nos regalaron algunos otros muebles. Y digo suerte porque fue gracias a Luciana que conseguí otro trabajo.
Acá todos estamos muy relacionados, el lugar es chico y parece que uno no puede aislarse de su gente y siempre trata de buscar otros pares para sentirse más como en casa. Se organizan fiestas latinas, hay una radio latina, restaurantes latinos, entre otras cosas. Pero no es una secta, está bueno porque todos se mezclan. Siempre hay kiwis en el medio y gente de otros lugares y eso te permite conocer de todo un poco.
Es enriquecedor escuchar las historias de los que desde hace tiempo están acá, conocer experiencias, recomendaciones y cómo la gente vive esto de "vivir en otro país". No todo el mundo está enamorado del país, no todo el mundo quiere quedarse o está cómodo; y eso te nutre porque te hace ver las cosas desde diferentes perspectivas. Creo que mucho depende de qué venís a buscar acá: dinero, tranquilidad, diversión, conocimiento, intercambio cultural... Me parece que hay cosas que duran más que otras y un poco de todo debe de ser la clave. Veremos qué nos pasa a nosotros...

viernes, 12 de marzo de 2010

La familia de Fernando

En Nueva Zelanda se puede encontrar una mezcla de razas y culturas impresionante. Mucha huella europea por todos lados y asiática también. Los maoríes son gigantes y no es raro cruzarse con hippies o gente con looks muy extremos que parecen haber salido de un dibujito o, por qué no, de una película de terror!!!! Entre tanta diversidad de vez en cuando aparecen un cierto tipo de personas que me alegra encontrar: ¡son los familiares de Fernando! Sí, hemos descubierto que no solo tiene ascendencia belga sino que algo de kiwi tiene que haber en su sangre! Acá ya no llama la atención por tener aspecto de extranjero, acá es uno más de ellos (debo confesar que eso debe haber herido un poco su ego, ya no se siente el distinto! Jajajaja). Entre los parientes lejanos que hemos encontrado por las calles, me veo en la obligación de destacar el caso de su hermano perdido! Lo encontramos en la feria que vamos los domingos, de casualidad, cuando el hambre nos sorprendió y nos dirigimos a un puesto de choripanes que atendía el jóven con su presunto "padre". Nos gustaría que Christiane nos aclare un poco el panorama, porque Fernando está muy confundido con todo esto! El choripanero es más chico pero tienen grandes similitudes, rascarse la cabeza y despeinarse continuamente, la forma de hablar tan particular, entre otras!!!!
Miren la foto y díganme si no se parece!!!!

Windy Wellie




Hace mucho que no les cuento cómo andamos por esta parte del mundo, asique voy a escribir un poco...
Ya hace dos semanas que dejamos la vida de hostel y empezamos la vida de flatmate. Acá es muy común que la gente comparta departamentos con otros porque así pueden ahorrar un poco. El tema de los flatmates es así: primero uno busca en todos lados posibles departamentos de acuerdo a precio y ubicación. Directamente se le manda un mensajito al que publicó y ahí se arregla una entrevista. Te muestran la casa, tu posible habitación y te hablan del precio. Acá es como una entrevista mutua: ellos te evalúan a vos como posible compañero y vos ves si te meterías a vivir con ellos. Y creanme que es útil tener estas entrevista porque te encontrás con muchos personajes y ambientes!!!! Un departamento espectacular en un edificio refaccionado que era una fábrica de zapatos con comida orgánica gratis! Un piso a compartir con varios latinoamericanos con piscina, gimnasio y muuuucha roña por todos lados. Un piso en pleno centro con chicas que eran el equivalente al "tipo na!" de Argentina, entre otros más. Finalmente, nos decidimos por una casita que compartimos con un kiwi y un indio. Digamos que la limpieza no era el fuerte del lugar y que los aromas ni bien uno entraba lo hacían sentir a uno en el medio de una cacerola con pollo al curry, pero la verdad que buena onda los chicos. Con Nittan, el indio, compartimos más tiempo y con él visitamos algunas partes de la ciudad y de los alrededores. Piensa ir a Argentina, asique van a tener que recibirlo, es económico, siempre come lo mismo y es tan flaco que a mí me daba miedo que una ráfaga de las de Wellington se lo lleve para siempre!
Pasamos dos semanas en este depto, a mí me quedaba super cerca del trabajo y estábamos muy cómodos porque ellos trabajaban todo el día, asique nosotros como buenos desocupados disponíamos del lugar como queríamos. Fer practicó muchísimo inglés con ellos, le vino muy bien, salvo cuando tiraba algún chiste traducido y los otros lo miraban con cara de "por qué te reís"???? En cuanto a mí y el inglés: yo me canso un poco rápido de hablar, asique lo dejo a Fer para que practique jajajajaja.

miércoles, 3 de marzo de 2010

Wellington



Dejamos Auckland de una forma algo particular. Desde Argentina habíamos reservado dos asientos en un micro que tardaba 12 horas en llegar a Wellington porque la tarifa era super barata. El micro se llama NakedBus (la traducción literal sería algo así como "micro al desnudo"). Cuando llegamos a la parada en Auckland nos encontramos con una chica flaquita y chiquitita en la puerta del micro. Nos pidió el código que nos mandaron por mail y rápidamente agarró una de nuestras valijas y se mandó hacia adentro de la bodega del micro! Acomodó todo y siguió con otros pasajeros. Ella misma conducía el micro, nos hablaba por el micrófono y arreglaba el equipaje. La chiquita iba rapidito por la ruta, pasaba camiones y le daba con ganas en las curvas. El micro no era para nada cómodo, pero por lo que habíamos pagado no nos podíamos quejar. Estuvo bueno el viaje porque conocimos muchos lugares (obvio que el recorrido era super lechero) y vimos muy buenos paisajes.
Llegamos a Wellington (o Windy Wellie como lo llaman acá por el viento) y empezamos a caminar en busca del hostel que habíamos reservado. Acá todo va en subida y en bajada, y como es ley, cuando uno está cargado hasta la cabeza todas las calles van en subida!!!! Asique empezamos a arrastrar el equipaje... Tardamos en encontrar el lugar y yo abandoné casi al final porque no tenía más fuerza en los brazos, asique esperé a Fernando en una esquina hasta que volvió a ayudarme. El hostel tenía su encanto (solo que apareció los últimos días de estadía!!). Teníamos una habitación doble con una decoración estaba buena, pero el detalle era que quedaba en un garaje!!!!! Para ir al baño teníamos que salir al patio delantero del hostel (o sea casi a la calle), poner un código en la puerta y atravesar el hall! No muy cómodo en ciertas situaciones críticas! Jajajajaj Igual, después de unos días nos acostumbramos; el desayuno gratis y la conexión a Internet pudo más!
Durante los primeros días acá no pudimos ver mucho de la ciudad, como saben esta va a ser nuestra base durante un tiempo y eso implica muuuuchas tareas (más de las que se puedan imaginar).
Les muestro de paso algunas fotos y después les cuento más sobre este lugar y sobre los familiares perdidos de Fernando que encontramos por estos pagos!