domingo, 5 de agosto de 2012

Tercer destino: Koh Phi Phi



Después de una noche en Phuket Town, nos fuimos a Koh Phi Phi en barco. Llenos de expectativas y con muchas ganas de pasar días en una playa con agua cálida nos embarcamos en un viaje de dos horas y mucho mucho calor.
Llegamos y nos recibieron con la amable noticia que debíamos pagar una especie de impuesto para entrar a la isla. Después, otro grupo de Tailandeses nos esperaban ansiosos por ofrecernos alojamiento.
Si bien esta gente era muy cordial y amable (todos pertenecían al departamento de turismo, por eso no eran tan insistentes como el resto) decidimos buscar nosotros mismos y empezamos a caminar cargados con las mochilas.
Nos dirigimos a la parte más tranquila de la isla, pero no nos convenció mucho la ubicación. Las playas estaban llenas de botes y los resorts llenos de asiáticos con un concepto de vacaciones un poco diferente al nuestro. Es por eso que decidimos cruzar la isla y buscar por el otro lado.
Encontramos un hotel normal, sin nada de lujo, pero con mucha onda sobre la playa, en la parte más ruidosa de la isla, en donde se hacían las fiestas a la noche.
Nos juntamos con unos argentinos y arreglamos para vernos a la noche y tomar algo para disfrutar la playa. La juntada sucedió pero no disfrutamos mucho de la playa, ya que la fiesta de la noche nos contagió y terminamos todos bajos los efectos de los baldes llenos de alcohol característicos de Tailandia. Estos baldes, iguales a los que los chicos usan en la arena, los llenan de diferentes bebidas, y dependiendo del precio la calidad varía. Se nota que nuestros baldes no eran de los más caros porque al otro día todos terminamos bastante intoxicados (otra palabra para resacosos jajaja).
Aprovechando la "intoxicación", no hicimos mucho al día siguiente, más que disfrutar de la playa, el sol, la arena muy fina y blanca y el agua cálida.
El lugar es un paraíso y levantarse directamente en la playa lo hacía aún más especial.
La isla está llena de puestitos que venden ropa, accesorios y pinturas. Los turistas pasean después de un día de playa y antes de que la fiesta comience. Una vez que la noche cae, los bares preparan las playas para que la gente se relaje mientras toma algo y vea cómo algunos tailandeses hacen malabares con fuego. Al pasar las horas estos malabares se vuelven cada vez más peligrosos y los malabaristas se olvidan que la gente los rodea y comienzan a tirar las llamas para cualquier lado!!!!
La música a todo lo que da, mucho alcohol y mucho de todo hasta las tres de la mañana, cuando todo se apaga y todos dan vueltas hasta encontrar su hotel. Durante la fiesta es muy común ver a algunos borrachos en los locales de tatuajes sin mucha idea de por qué se quieren tatuar.
En los días que siguieron hicimos algunas excursiones a las islas alrededor de Koh Phi Phi. Fuimos en un barco que nos dejó en los diferentes lugares y pudimos hacer kayak y snorkelling. Uno de los destinos fue Maya Bay, el lugar donde se filmó la película La Playa. Es impresionante esa bahía, el agua es verde y la arena tan fina que crea una sensación extraña en los pies. Un paraíso.
Otro de los lugares que me llamó mucho la atención es Bamboo Island. No tan conocida como Maya Bay pero digno de ser visitado. Es mi definición de paraíso: una isla pequeña, arena fina, agua celeste y cálida en donde se puede nadar sin olas, sin corales que lastimen los pies y una paz contagiosa. Me hubiese quedado días ahí!!!!
El resto de Koh Phi Phi es alusinante, aquí comenzamos a conocer la comida tailandesa y descubrir los platos típicos, como el Pad Thai del que me volví adicta. Más adelante en nuestro viaje nos daríamos cuenta de la diferencia entre la gente del sur y la del norte del país (así como también las diferencias en la comida).
El estilo de vida de la gente que vive aquí es simple, todo el mundo anda en bicicleta (no hay autos en la isla) y son muy amables. El pueblo de Koh Phi Phi sufrió el gran tsunami de hace varios años, parte de la isla (como el lugar en donde nos quedábamos) fue reconstruida después de esa desgracia. Todavía se pueden ver algunos daño ocasionados por la ola gigante.
Koh Phi Phi fue uno de los mejores lugares del viaje. Un lugar imperdible y lleno de paisajes maravillosos.



Aquí algunas fotos! :)

jueves, 28 de junio de 2012

Segundo destino: Phuket Town

Despues de tres dias en Kuala Lumpur nos tomamos un avio a Phuket, en Tailandia. Esta vez el avion salio del aeropuerto KLIA de KL. Mucho mas moderno, gigante y con las free shops enormes, muy diferente al aeropuerto al que llegamos a Malasia.
Ya desde el avion se podian ver las islas de Tailandia, parecian dibujadas en el mar calmo. Muy diferente a lo que se ve cuando se llega a NZ, ya que la vegetacion es mas tropical, de un verde oscuro, mojado. Tambien es diferente el color del agua, de lejos da la sensacion que son aguas mas calidas (o quiza eran mis ganas de meterme en un mar calido, no lo se...)
Fiel a nuestra Lonely Planet y siempre con esa obsesion por buscar lo mas local nos tomamos un colectivo del gobierno que nos llevo a la ciudad. Despues de una hora de viaje (segun el conductor eran solo 20 minutos) llegamos muy de noche a la terminal. Lo primero que vimos fue una rata que nos saludo con la panza llena. Estabamos con un grupo de argentinos y como nosotros no teniamos reservado nada, los seguimos y nos fuimos al hostel que habian reservado ellos. Ahi encontramos un grupo grande de uruguayos que formaban parte de un grupo de 300 uruguayos que estan dando la vuelta al mundo y se van encontrando en el camino. Es algo que organiza la universidad a la que asisten. Muy buen programa la verdad!
Pasamos la noche en esa ciudad que no tiene mucho para ofrecer, solo un lugar de transito camino a las islas.
A la manana siguiente compramos el bote para ir a Koh Phi Phi y recorrimos un poco el lugar. Visitamos el mercado, en donde vimos partes a la venta de todos los animales posibles. Ni bien salimos del mercado nos encontramos con miles de motos de aca para alla. Gente que iba y venia, que estacionaba en donde podia y que compraban verduras y frutas en los puestos de la calle.
Pero no solo el transito era caotico... la ciudad esta llena de cables por todos lados. Los postes soportan kilos y kilos de cables que tapan las ventanas de los segundos pisos y dan la sensacion de que en cualquier momento se caen y todos mueren electrocutados...
Desayunamos/almorzamos una pizza con estilo Thai hecha por un tailandes reconocido por esos pagos por haber creado este estilo de pizza. Como no podia de ser de otra forma, la pizza super picante, lo cual aumento al maximo el calor que ya veniamos sintiendo.
Volvimos al hostel y nos fuimos a tomar el barquito a Kho Phi Phi, ansiosos porque era alli donde iban a empezar nuestras verdaderas vacaciones.
Aca van las fotos!

miércoles, 20 de junio de 2012

Primer destino: Kuala Lumpur - Malasia

Ya volvimos de unas lindas vacaciones por Malasia y Tailandia. Ahora a empezar con la rutina y a soportar el invierno que se aproxima :( Qué linda es la vida del no hacer nada más que preocuparse por cuántas noches uno se queda en un lugar, qué comemos a la noche y qué hacemos al otro día! En fin...
El primer destino fue Kuala Lumpur. Llegamos al aeropuerto LCCT en un vuelo de AirAsia con bastantes turbulencias y asientos super angostos. Después nos tomamos el micro a la terminal de la ciudad, KL Sentral, y de ahí el monorail al barrio del hostel. Después de probar todos los medios de transportes llegamos a nuestra hermosa posada :S La Guest House que habíamos reservado desde casa era impresentable! Nuestra habitación no tenía ventanas y era bastante fea. La zona en donde estaba ubicada no era justamente la más pintoresca y el chico de la recepción se la pasaba tirado en un sillón con el aire acondicionado a tope durmiendo la siesta. Pero bueno, son los riesgos que se corren cuando se reserva algo desde lejos.
Pasamos tres días en Kuala Lumpur y creo que fue suficiente. Es una ciudad linda pero no tiene mucho para recorrer y el calor es extremo! Pienso que podría ser una ciudad para trabajar un tiempo, pero para el turismo en un tanto limitada.
El primer día decidimos conocer Chinatown y Little India, dos comunidades grandes del país. El barrio chino está lleno de puestos en las calles que ofrecen lo que se les ocurra y lo que no para comer. Además, entre estos puestos de comida se encuentran puestos que venden carteras, zapatillas, anteojos y ropa de imitación. Hay de todo y para todos los gustos, productos de buena calidad y algunos que dejan mucho que desear. Siempre, siempre hay que regatear, es la ley en estos países. La mezcla de olores de las diferentes comidas, el impacto visual de ver tantos puestos juntos y la cantidad de gente atravesando estos mercados es una experiencia única; y creo que impacta mucho más cuando uno viene de un país como Nueva Zelandia donde la aglomeración no es justamente algo muy común.
Entre ruidos, bocinas, templos, comerciantes tratando de atraer a nuevos clientes y olores un tanto extraños pasamos el primer mediodía en el continente asiático. Después, nos dirigimos a Little India que está pegado al barrio chino y nuevamente nos encontramos con descontrol.
Aquí ya no se ven tantos puestos en las calles, pero sí música india a todo volumen que sale de los locales, mucha gente yendo y viniendo y olor a sahumerio por todos lados. Los altares que veneran a sus dioses se encuentran en todas las cuadras y están cubiertos de sahumerios, botellas de agua y hasta comida que le dejan sus fieles.
Uno de los días, mientras tomábamos algo en un bar vimos cómo unas tras otras las un grupo de prostitutas al altar que esta dentro del bar, le traían agua y sahumerios a su Dios y le rezaban. No se qué le pedirían, pero todas salían muy contentas a buscar clientes.
Obviamente, vimos las torres Petronas. Son imponentes! El estilo, la arquitectura... Nos gustó mucho. No pudimos subir porque cuando finalmente nos decidimos estaba cerrado para los turistas. Tendremos que volver para tener esa experiencia... Delante de las torres hay un shopping super lujoso en donde se encuentran las marcas más importantes de ropa, detrás hay un lago con fuentes danzantes y un pequeño parque de agua para que los chicos se refresquen.
El segundo día visitamos el Lake Garden y experimentamos uno de los típicos engaños a los turistas. Para llegar nos tomamos un taxi y cuando estábamos cerca del lugar el conductor nos comenta que ya no había lago en el lugar, que se había secado y que era mejor ir a un parque de aves que estaba cerca. Por supuesto que no le creímos y le pedimos que sí o sí nos deje en el lago (además, ver pájaros no es precisamente lo que más me gusta en el mundo con el miedo que les tengo!). Caminamos por los jardines y obviamente vimos el lago gigante en el centro! Parece que es un spot ideal para que los recién casados se saquen fotos porque estaba lleno de parejas. Moraleja: nunca creerle a los taxistas e investigar un poco antes de ir a los lugares porque la gran mayoría recibe comisión por llevar clientes a estos parques y hacen cualquier cosa para engañarte.
En cuanto a la gente que vive en Kuala Lumpur, la mayoría son musulmanes. Las mujeres tienen el pelo cubierto todo el tiempo y a algunas solo se les ven los ojos, ninguna otra parte del cuerpo. No comprendo mucho qué diferencia hay entre cada forma de estar cubierta, pero lo único que pensaba era en el calor que yo sufriría si tuviera que estar cubierta de pies a cabeza con colores oscuros todo el día en esa ciudad.
Como acá vemos locales que venden hebillas, colitas y vinchas, allá hay locales que venden los pañuelos que usan para cubrirse el pelo. Tienen de todos los colores y estampados.
Nos gustó mucho Kuala Lumpur, tiene contrastes llamativos a pocas cuadras de distancia: por un lado los templos chinos e indios y por el otro shoppings lujosos con las mejores marcas del mundo. La gente es servicial y amable aunque su forma de manejo demuestre lo contrario :)

Chinatown

Torres Petronas


Les dejo lagunas fotos por acá.

domingo, 22 de abril de 2012

Atrapados

Hace unas semanas nos enteramos que finalmente Aerolineas Argentinas va a cortar los vuelos directos a Argentina desde Auckland. Se venia hablando sobre esto desde hace mucho, pero nadie pensaba que iba a convertirse en realidad hasta que nos enteramos de la gran noticia.
Para poder ir a Argentina desde Nueva Zelandia, vamos a tener que comprar un pasaje de LAN que tiene un valor de como minimo 2200 NZD casi siempre, parar en Chile y de ahi viajar a Argentina.
Otra opcion es seguir con Aerolineas, pero deberemos viajar a Sydney y de ahi a Argentina. O viajar por Emirates y hacer escalas en Asia, Europa y finalmente llegar a Argentina (mas o menos unas 30 horas de viaje).
Que loco que hayan cortado esta ruta! Cuando viajamos a Argentina la ultima vez la azafata nos dijo que era una ruta muy tranquila y muy favorable para volar. Ademas nos comentaba que siempre, siempre el avion iba lleno.
Evidentemente, no era muy cierto porque parece que esta ruta no era redituable para la empresa.
Vivir en una isla, por mas desarrollada que este, hace que la vida este un poco aislada de la del resto del mundo; y de vez en cuando aparece esa sensacion de estar atrapados. Dependemos de aviones para poder salir de aca, para visitar cualquier otro lugar. Son un medio de transporte esencial para la isla.
Muchos nos quejabamos de los viajes por Aerolineas, por el servicio, el avion y a veces alguna que otra azafata que no estaba en su mejor dia. Viajar por Aerolineas era como viajar en uno de los micros lecheros que te llevan a los pueblos del interior de la provincia: el servicio no es el mejor pero es el mas economico y el que te permite viajar mas seguido. Creo que todos los que viven permanentemente en NZ se lamentaron al enterarse de la noticia, porque era la via que nos permitia ir a visitar a nuestra familia y amigos mas seguido, sin que represente un gasto tan grande.
Me pongo a pensar en las familias, los que viven aca con dos hijos o mas. Como haran para ir a Argentina todos juntos? Si un pasaje no baja de 2200 NZD, como haran para poder ir hasta alla para que los chicos vean a sus abuelos y tios? Seguramente lo hagan, pero deberan tener que esperar un tiempo mas entre visita y visita.
Estaran los que piensen que es una de las consecuencias de elegir vivir en otro pais, y quiza tengan razon. Pero a veces uno decide hacerlo sabiendo que siempre cuenta con una vuelta a su pais. Una visita cada ano que llene el corazon de amor y los pulmones del aire de nuestra tierra para poder seguir viviendo tan lejos.

Una lastima que no podamos contar con este servicio. Esperemos que haya alguna otra opcion pronto. No es lindo sentirse atrapado.

P.D.: Perdon por la falta de acentos. No puedo configurar el teclado en esta compu.

domingo, 15 de abril de 2012

Buen gesto

La semana pasada leí en el diario Capital Times que reparten gratis en la ciudad un pequeño artículo en donde un lector anónimo agradece a las personas que lo ayudaron cuando se cayó a la salida de un restaurante. Cuenta que una enfermera que justo pasaba por ahí con su auto paró para ayudarlo y menciona a otras que también lo asistieron. No hay nombres publicados, solo se menciona al servicio de ambulancias.

En estos tiempos de muchas injusticias y egoísmo es más fácil señalar lo que los otros hacen mal que destacar las buenas acciones que recibimos de los que nos rodean. Quizá es porque no abundan las buenas acciones, o quizá porque nos hemos acostumbrado a ver lo malo y pasar por alto esos pequeños buenos gestos. También es verdad que es más fácil recordar cosas que nos han afectado de forma negativa, porque dejan un sabor amargo que es difícil de borrar.

Últimamente, veo que se utiliza Facebook para expresar el descontento con situaciones actuales, con el gobierno y con ciertos acontecimientos, pero creo que nunca leí a nadie que haya escrito en agradecimiento o para señalar un pequeño gesto que lo haya beneficiado.

Me parece bien expresar injusticias o descontentos porque ponen en evidencia a quienes se manejan con impunidad en esta sociedad, pero de tanto en tanto destacar un buen gesto nos ayudaría a ir para adelante y ver que no siempre todo lo que nos rodea está tan contaminado. Algunos pensarán que los buenos gestos no deberían ser destacados porque es así como todos deberíamos manejarnos, pero expresarlos puede ayudar a que otros vean que no todo es tan negativo.

Un buen gesto que recibí hace unos meses fue de parte de una pareja asiática. Una mañana llego a la estación y veo que el tren estaba parado ahí. El personal del tren informa a todos que hay un tren roto en uno de los túneles y que no se sabía cuándo se iba a reanudar el servicio.

Cuando empiezo a caminar para ver en dónde me podía tomar un micro o algo para llegar a horario al trabajo, una pareja se acerca y me dice que ellos se iban a ir en su auto y me ofrecen llevarme a la ciudad. Así, sin conocerme se ofrecieron a llevarme y me salvaron de llegar tarde.

Estaría bueno empezar desde ahora a recordar estas pequeñas actitudes...

jueves, 5 de abril de 2012

Happy Easter! - ¡Felices Pascuas!

¡Otro año que paso Pascuas lejos de mi familia! Ya empieza la Semana Santa. Acá se hace difícil no confundir la Semana Santa con un simple fin de semana largo, ya que la gran mayoría de las personas no celebra esta fecha de la manera que lo hacemos en Argentina. Pero bueno, cada uno tiene sus creencias y puede seguir el camino de la fe a su manera.

Les dejo algunas curiosidades de Pascuas por estos lados:


  • El equivalente de la rosca de pascuas es el Hot Cross Bun, una especie de factura con especias y pasas de uvas, que tiene una cruz blanca arriba. La venden en todos lados, pero las caseras son las que valen, el resto tiene gusto a cartón. 

  • Huevos de pascuas de malvaviscos. Esta obsesión con los malvaviscos no tiene límites. También los huevos de pascuas tienen una versión de este tipo. Es extremadamente empalagoso y puede ser un chasco si uno no lee la etiqueta y piensa que se va a encontrar con un huevo de chocolate común y corriente. 

  • Búsqueda de huevos o Egg Hunt. Los padres esconden los huevos, los nenes los buscan, los comen, se agarran un ataque al hígado padre, los padres los retan, los chicos lloran y finalmente los padres se arrepienten de haber comprado tantos chocolates.

  • Los supermercados cierran el viernes y el domingo. En un país con tanta devoción por el alcohol esto significa un problema mayor. Todo el mundo hace cola en los supermercados para abastercerse de cerveza y vino, no sea cosa que los agarre el viernes y el domingo sin nada para mojar los labios! 

  • Los días no laborales por Semana Santa van del viernes al lunes.




  • Espero que pasen Felices Pascuas. Sin importar si son religiosos o no, sería bueno que estos días sirvan para pasar tiempo con la familia, descansar y reflexionar. A todos nos vendría bien parar un poco y pensar en los demás...

    lunes, 2 de abril de 2012

    Buenos vecinos

    El fin de semana pasado tuvimos un asado a lo kiwi con los vecinos de nuestra cuadra. El evento fue parte de una movida para promover la interacción entre los vecinos en todo Wellington.
    Como pasa con la mayoría de las relaciones en este país, esto no fue algo espontaneo. Para conocer a nuestros vecinos hubo que establecer una fecha, una hora y un lugar para hacerlo.

    Primero, una vecina se acercó a nuestra casa para presentarse y preguntarnos si estábamos de acuerdo.
    Segundo, recibimos la invitación con la información sobre qué llevar, qué se hacía en caso de buen tiempo y mal tiempo.
    Y por último, la semana anterior a la reunión recibimos un recordatorio en nuestro buzón sobre la reunión.

    Tal como la costumbre kiwi lo requiere, cada uno de los invitado debía llevar algo para tirar a la parrilla, ensalada, la bebida y algo para sentarse. En la invitación se especificaba claramente que podíamos llevar algo para compartir, pero que no era obligatorio (es tan kiwi esta especificación!)

    El domingo a la tarde llevamos nuestras cosas al lugar de encuentro junto con mucha expectativa mezclada con intriga. Hace ya más de un año que vivimos acá y solo conocemos a la vecina de al lado y a un filipino que nos habla en español de vez en cuando. No es común ver a la gente por la calle y nuestros horarios parecen no coincidir con los del resto.

    Al llegar, nos encontramos con un grupo de personas mayores en general alrededor de las dos parrillas, una mesa larga llena de ensaladas y comida para compartir y algunos globos colgando que marcaban el lugar de reunión.

    Si bien era en la vereda, nos recibió una de las organizadoras y nos puso una etiqueta con nuestro nombre y el número de casa para que nos identificaran. Y así, identificados y curiosos nos metimos en la reunión a comer y presentarnos...

    Fue una tarde hermosa. Sin viento y con mucha charla. Comimos, nos reimos y conocimos a la gran mayoría de nuestros vecinos.

    De las conversaciones nos enteramos que:
    • La mayoría hace más de 20 años que vive en la cuadra.
    • Tenemos un vecino que tiene una pierna ortopédica y sube la calle empinada de casa en bicicleta (tarea casi imposible!)
    • En la cuadra hay un perro que es sordo.
    • También hay un samoano padre de siete hijos tan tímidos que no se asomaron al asado.
    • Una pareja estuvo en Argentina y no pararon de preguntarnos cómo hay tantos perros sueltos en las calles, estaban sorprendidísimos.
    Después de ese domingo, no volvimos a ver a ninguno de ellos. Cada uno sigió con su rutina y como antes, no nos volvimos a cruzar.

    Saludos para todos y en especial para Lore y Pauli las vecinas más lindas que tuve!!!!

    PAu









    La tercera es la vencida

    Bueno, acá estoy por tercera vez reiniciando las actividades en el blog.
    No es que me haya olvidado de él, pero no encontraba el momento -quizá la motivación- para escribir.
    Esta vez aprovecho la ola inspiradora en la que me subí durante el curso de escritura para seguir escribiendo por este medio.
    La tercera es la vencida todos dicen, y espero que sea así y que me duren las ganas de escribir durante un tiempo más...